A paso de tortuga

Iba la tortuga
Despacito, andando
Por entre guijarros
A orillas del mar

Una garza blanca
De pico muy largo
Le dijo: qué amargo
No puedes volar

Siguió su camino
La tortuga lenta
Dejando en la arena
Su huella fugaz

La vio una gaviota
De plumaje oscuro
Le dijo: qué duro
No poder volar

Siguió la tortuga
Su marcha cansada
Pequeña, obstinada
Queriendo llegar

La vio un aguilucho
Cazador muy ducho
Quien dijo altanero:
No puedes volar

La encontró un cangrejo
Y mirando lejos
Le dijo: no vuelas
Mas puedes nadar

Y bajo una ola
Espumosa y blanca
Cangrejo y tortuga
Volvieron al mar.


1 comentario:

  1. La pena es que algunos ni volamos ni nadamos. Bello poema.
    He puesto un enlace de tu blog en mi web "Los cuentos tontos", en la sección "Otros sitios".
    Un abrazo

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